Diferencias entre Asesoría Fiscal, Contable y Laboral: ¿Qué Hace Cada Una?
Si eres autónomo, tienes una pyme o estás pensando en emprender, seguro que ya has escuchado más de una vez términos como “asesoría fiscal”, “contable” o “laboral”. A menudo se usan de forma indistinta, pero en realidad cada una se encarga de aspectos muy distintos de tu negocio. Saber qué hace cada una es clave para que no te pille el toro cuando llegan los impuestos, las nóminas o los balances anuales.
En este artículo te lo explicamos de forma clara y sencilla, sin tecnicismos, para que sepas qué esperar de cada servicio y puedas gestionar mejor tu empresa o actividad profesional.
1. ¿Qué es una asesoría fiscal?
La asesoría fiscal es la encargada de ayudarte con todo lo relacionado con tus obligaciones con Hacienda. Su función principal es que pagues lo justo (ni más, ni menos) y que lo hagas a tiempo y de forma correcta.
Lo que hace una asesoría fiscal:
- Presentación de modelos tributarios: IVA (modelo 303), IRPF (modelo 130 o 131), resumen anual (modelo 390), retenciones (modelo 111), etc.
- Preparación de la declaración de la renta y del impuesto de sociedades si tienes una empresa.
- Asesoramiento sobre qué gastos puedes deducirte legalmente.
- Información sobre posibles subvenciones, bonificaciones o deducciones fiscales.
- Representación ante Hacienda en caso de inspecciones o requerimientos.
En resumen, su objetivo es optimizar tu situación fiscal, evitando errores que puedan generar sanciones o pagos innecesarios.
2. ¿Qué hace una asesoría contable?
La contabilidad es la parte que se encarga de llevar el control financiero de tu negocio: lo que entra, lo que sale y cómo se organiza. Puede parecer algo tedioso, pero es fundamental para conocer la salud de tu empresa y tomar buenas decisiones.
Funciones de una asesoría contable:
- Registro y control de ingresos y gastos.
- Elaboración de libros contables obligatorios: libro diario, libro mayor, balances, cuenta de pérdidas y ganancias, etc.
- Preparación de informes económicos y financieros.
- Apoyo para saber si tu negocio está siendo rentable.
- En empresas, presentación de las cuentas anuales en el Registro Mercantil.
En pocas palabras, una buena asesoría contable te ayuda a tener claridad sobre cómo va tu negocio. Es tu “mapa económico”.
3. ¿Qué hace una asesoría laboral?
Aquí entramos en el terreno de las relaciones laborales: contratos, nóminas, Seguridad Social, altas y bajas… La asesoría laboral es clave si tienes o vas a tener empleados. También te sirve si eres autónomo y necesitas ayuda con tu propia situación laboral (como las bases de cotización o las bonificaciones disponibles).
Funciones principales de la asesoría laboral:
- Gestión de contratos laborales: redacción, prórrogas, modificaciones.
- Cálculo y emisión de nóminas, pagas extra, finiquitos y liquidaciones.
- Altas, bajas y variaciones en la Seguridad Social.
- Tramitación de partes de baja por enfermedad o accidente.
- Asesoramiento sobre convenios colectivos, jornadas, vacaciones, etc.
- Representación ante organismos como el SEPE o la Seguridad Social.
Si quieres cumplir con la legislación laboral y evitar conflictos con tus trabajadores o la administración, este servicio es imprescindible.
¿Puedo contratar los tres servicios en un mismo sitio?
Sí, y de hecho es lo más habitual. Muchas asesorías —como la nuestra— ofrecen un servicio integral, donde se combinan las tres ramas (fiscal, contable y laboral) para darte una gestión completa.
Esto tiene muchas ventajas:
- Menos líos: todo centralizado en un solo equipo.
- Coordinación interna: los departamentos se comunican entre sí y trabajan de forma conjunta.
- Ahorro de tiempo y esfuerzo para ti, que puedes centrarte en tu negocio.
¿Cuál necesito si estoy empezando?
Depende de tu situación. Si eres autónomo sin empleados y con pocos movimientos, probablemente con el servicio fiscal y contable tengas suficiente. Pero si vas a contratar personal o tienes una empresa, el laboral también es clave.
Eso sí, nuestra recomendación es que, desde el principio, tengas al menos un buen asesor fiscal. Es quien te guiará con los impuestos, y un error aquí puede salir caro.
Conclusión
Aunque los términos «asesoría fiscal», «contable» y «laboral» suenen parecidos, en realidad cubren áreas muy distintas. Cada una cumple una función específica y todas son importantes para el buen funcionamiento de un negocio.
Contar con el apoyo de profesionales especializados te da seguridad, tranquilidad y tiempo para dedicarte a lo que realmente importa: hacer crecer tu proyecto.
¿Tienes dudas sobre cuál necesitas? ¿Te gustaría que te ayudáramos con la gestión de tu actividad? En Asesoralia estamos aquí para acompañarte, asesorarte y hacer que todo sea más fácil. Sin complicaciones. Sin sorpresas.